LOS BLOGS: ¿PERIODISMO CIUDADANO?

Hace más de 3 meses, cuando acababa de llegar a Europa y estaba de frente a uno de los mayores desafíos de mi vida profesional y personal como ha sido venirme a Barcelona, inicié este blog para mantener informados a todos mis seres queridos y amigos sobre los pasos que estoy dando en el Viejo Continente.

Para quienes no los conocen, los blogs son sitios web gestionados por sus propios autores, en los que se pueden incluir fotos y textos que se dividen en “entradas” separadas por fecha y ordenadas de manera inversa, es decir, que lo último que se escribe es lo primero que aparece en la pantalla.

Mi objetivo era muy sencillo: en vez de repetir 10 veces lo mismo cada día, lo escribía, le agregaba un par de fotos y ya estaba. Lo demás fue repartir la dirección y ahora todo el que quiere saber de mí ingresa a mi blog.

Esto que parece así de simple –y que en verdad lo es- multiplicado por miles de personas que han hecho lo mismo ha dado como resultado que en la actualidad haya más de 57 millones de blogs en el mundo.

Los analistas hablan de “la Imprenta del siglo 21” y del avance del “periodismo ciudadano”, en el que cualquiera puede informar lo que ocurre casi en tiempo real.

Los alcances de esto son dificiles de imaginar. Acabo de estar con un amigo que se enamoró de una chica que visitó su blog y viajó a Chile a conocerlo. Hoy están felices y juntos en Barcelona.

A pesar de eso, veo muy difícil –al menos en el mediano plazo- que la gente cambie sus hábitos y los blogs reemplacen a los diarios de papel como proponen algunos. De hecho hay que considerar que los diarios electrónicos y las páginas web de los matutinos no han logrado reducir las ventas de periódicos impresos.

A mi juicio todo pasa por comprender que los blogs no son periodismo, aunque los escriban periodistas como es mi caso. Tienen otro formato, lenguaje, sentido, objetivo y por ello no van a acabar con los medios tradicionales.

¿Y los que los escriben son “periodistas ciudadanos”?. No lo sé. Esa es otra discusión. Yo al menos llevo una simple bitácora. Sin mayores pretenciones cuento lo que hago y siento cuando tengo tiempo y me apetece. Además, sinceramente, escribiendo mi blog trato de ser más cuidadano que periodista. Nos vemos.